Aunque el turismo domina gran parte de la costa quintanarroense, basta con dirigirse al interior- en destinos como Cancún y Playa del Carmen a veces es suficiente con alejarse dos cuadras de la zona turista, para captar fugaces atisbos de la vida moderna de Yucatán.
Los curiosos por la cultura pueden pasear por las calles adoquinadas y visitar los museos del pintoresco casco colonial de Mérida, también cabe contratar una excursión de un día hasta la cercana Valladolid, de camino de Chichen Itza o adentrarse un poco más para explorar pueblos mayas tradicionales como Nuevo Durango y Tihosuco. En cuanto uno se aparta de las zonas turísticas no importantes hacia donde surgen modos de vida distintos.
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